Por Alvaro Roncal
La menor inversión en el proyecto Mina Justa requerirá que nuevos proyectos mineros inicien su construcción en el 2020 para mitigar una potencial caída por primera vez en cuatro años. Si proyectos como Integración Coroccohuayco, Corani y Yanacocha Sulfuros no comienzan su desarrollo, ésta será inevitable.
Tras tres años de crecimiento, la inversión minera podría alcanzar su primer año de caída en el 2020. El capital de los proyectos Quellaveco (Anglo American), la ampliación de Toromocho (Chinalco) y Mina Justa (Minsur), que viene sosteniendo la inversión minera desde el 2018, ya no sería suficiente. “El 40% de la inversión se explica en virtud de esos tres proyectos. Es preocupante que en el 2019 no haya registro de proyectos nuevos que nos confirme un ciclo positivo de atracción de inversión”, afirma Pablo de la Flor, gerente general de la SNMPE.
Entre los proyectos mencionados —sumados a la reposición de capital que realizan las mineras cada año para operaciones de mantenimiento, compra de equipos, entre otros— la inversión minera estaría entre US$5,600 millones y US$5,900 millones este año, cifra menor a los US$6,157 millones del 2019, de acuerdo a las cifras de LQG Energy and Mining Consulting —ex Laub & Quijandría— y de Macroconsult. «Mina Justa inclusive va a invertir cerca de US$200 millones menos que en el 2019», señala Isaac Foinquinos, analista senior de Macroconsult.
El inicio de la construcción de los proyectos que están hoy en la cartera del Minem podría paliar la caída esperada. Yanacocha Sulfuros (Yanacocha), Corani (Bear Creek) e Integración Coroccohuayco (Glencore) deberían ser los que tomen la posta, pero éstos cargarían con sus propios problemas que retrasarían cualquier potencial construcción. Bear Creek todavía no encuentra socios que cofinancien Corani; Integración Coroccohuayco debe todavía pasar por una consulta previa que no estaría exenta de nueva conflictividad social, debido a discrepancias en su ámbito de aplicación; y Yanacocha Sulfuros, si bien ya tiene estudios de factibilidad aprobados, no tiene luz verde aún de su directorio. “Estamos considerando US$3,000 millones de capex de sostenimiento. Entre Toromocho, Quellaveco y Mina Justa alcanzas casi el 100% del capex para crecimiento. Ojo: estamos siendo positivos y podría ajustarse más”, señala Ricardo Labó, socio de LQG Energy and Mining Consulting (ver gráfico).
“Son proyectos que sí podrían iniciarse, pero inclusive el desembolso y la ejecución podría tomar un poco de tiempo. Dudo que lo que vayamos a ver en el 2020 sean montos importantes”, indica Carlos Diez Canseco, gerente general del IIMP. En ese sentido, se requeriría del inicio de construcción de Corani, Yanacocha Sulfuros y la Integración Coroccohuayco en el 2020 para poder mitigar la menor inversión de Mina Justa, afirma Foinquinos, de Macroconsult. Ese escenario es poco probable, coinciden las fuentes.
El fin de la construcción de la ampliación de Toromocho en el 2021 dejaría a Quellaveco como único proyecto que sostendría a la inversión minera en adelante, lo que eleva el riesgo de una prolongada aridez en el sector. Pero las fuentes ven un escenario así de pesimista como poco probable. “En el 2021 sí podrían tener inversiones Coroccohuayco, Corani, Magistral (Nexa Resources), San Gabriel (Buenaventura), entre otros”, asegura Labó. Así, el 2021 sería clave para recuperar el tropiezo que supondrá el 2020 para la inversión minera, luego de cuatro años consecutivos de buenas noticias.
Fuente: Semana Económica